Para mí un adulto exitoso no es el que más dinero gana o
aparenta tener como muchos me pretenden hacer creer. Pienso que el que vive la
felicidad con frecuencia es más exitoso que el que se pasa la vida buscándola.
Con relación a las finanzas, considero que el éxito no se alcanza ganando más
sino manejando bien lo que conseguimos para vivir tranquilos y felices.
La educación tradicional está basada en enseñarnos
herramientas para que ingrese más dinero a nuestra cuenta. Me parece que es un
excelente inicio, pero no debemos quedarnos en ese paso si queremos lograr que
el dinero nos deje cerca de la felicidad. Podemos enseñar a los jóvenes lo que
complementa su preparación, la educación financiera. Aquí algunas sugerencias
para que ellos sean exitosos y no sólo que lo aparenten.
Escasez: No es obligatorio que la sientan, pero sí deben
saber que existe. La escasez no se da cuando no tenemos para comer, sino que la
vivimos en todos los ámbitos. Pocas familias tienen suficiente para poder
comprar todo lo que deseen, y lo malo de ellas es que sus hijos pocas veces le
dan valor a lo que tienen porque no les cuesta nada conseguirlo. Aunque les
pueda comprar algo a sus hijos es una buena enseñanza que aprendan a ganárselo.
Las deudas inteligentes y las tontas: Cuando alguien paga
por lo que usted debe, es una deuda que podemos llamar 'inteligente'. No es que
tome una deuda con la intención de que su fiador la pague, me refiero a que si
pone a producir el dinero los compradores son los que estarán pagando la deuda.
Deudas de consumo son las que se toman por no haber previsto el gasto o por no
esperar haberse ganado el dinero antes de disfrutar de la compra. Los jóvenes
deben aprender la diferencia, saber calcular la productividad que le sacará a
la deuda inteligente para que sea de utilidad, y conocer que las deudas tontas
se pueden evitar con disciplina y paciencia.
Espíritu emprendedor: Pero con mucho cuidado. Los
emprendedores son soñadores, es importante que puedan aprender a calcular y
convertir los sueños en un proyecto posible y rentable. Vivir trabajando para
otros es ser dependiente de muchos factores, pero emprender con el dinero de
los padres es un riesgo mayúsculo. No todos aprendemos a ser empleados ni todos
emprendedores, es importante saber lo que nos gusta, lo que podemos y lo que
queremos ser.
No esperar nada material a cambio: El que trabaja por el
monto que recibirá nunca trabajará por el placer que le causa el trabajo, al
final siempre estará deseando otro trabajo en el que gane más, no importando
cuánto gane. Realizar una labor sin esperar nada a cambio enseña a disfrutar de
lo que se hace y mucho más de lo que se recibe.
Asumir consecuencias: Cuando cubrimos a nuestros hijos
les enseñamos a no ser responsables. Muchas veces no nos damos cuenta que
aprenden a no pensar en las consecuencias porque saben que de alguna forma los
sacarán del problema. Muchos padres terminan asumiendo pérdidas económicas por
no haberlos enseñado a pensar en las consecuencias.
Estamos en Navidad, tiempo de agradar y demostrar cariño;
un regalo útil es lo recomendable. Hemos puesto mis 14 libros y 3 audiolibros
en especial en nuestro sistema de entrega a domicilio. Solicita las
informaciones enviando un correo-e a ventas@diegososa.info. Informaciones
también en www.diegososa.info/LibrosRD.
FRASE
DE LA SEMANA
“El éxito que es
apariencia sólo causa envidia en los demás y estrés en uno.”
Diego A. Sosa
Coach, Consultor,
Escritor y Conferencista
No hay comentarios.:
Publicar un comentario