sábado, 5 de abril de 2014

6 SEÑALES DE QUE NO ANDA BIEN FINANCIERAMENTE




Muchas personas me contratan para asesorías financieras personales, por lo general, un poco tarde. La mayoría no se da cuenta a tiempo por no conocer mucho de las finanzas y de las funestas consecuencias que tiene no manejarlas bien. He elaborado una lista para los que se quieran dar cuenta antes de que se les haga más tarde.
1- Se financia para hacer pagos corrientes: La comida, los gastos de la casa y la recreación no deben ser pagados con un medio que genere intereses. Usar la tarjeta de crédito y pagar cuando llega la cuenta no es financiarse, pero si terminamos pagando intereses y mora, la historia cambia. Si tenemos préstamos de consumo para poder mantener nuestro nivel de vida también es una señal de que las cosas no andan tan bien como aparentan. Sugerencia: limpie sus deudas apretándose el cinturón y cambie sus dogmas de egresos.
2- No tiene el control de las deudas: Uno de los principales problemas con que me encuentro es que los asesorados no conocen el monto de sus deudas. La mayoría de las parejas se esconden informaciones. Y la realidad es siempre más asustadora que lo esperado. Pero conocerla es el primer paso para controlarla. Haga una lista con absolutamente todo lo que debe.
3- Con frecuencia, toma anticipos de efectivo para pagar deudas acumuladas: En el trabajo o en otros medios de crédito como las tarjetas. La señal es clara y algunas opciones suelen costar. Unos meses de ajuste pueden llevar a una solución satisfactoria.
4- No cuenta con un fondo para emergencias: Ellas son parte integral de nuestra vida financiera, siempre llegan, lo que no sabemos es cuándo. Una opción es tomar un crédito cuando lleguen, pero puede ser que nos lleve a un círculo vicioso y nos introduzca cada día más en el camino de las deudas. En mi libro Arco Iris Financiero entrego un manual completo de cómo salir de las deudas.
5- Suele quedarse sin efectivo con mucha frecuencia: Señal ineludible de que malgastamos. No gastar porque el dinero está en la cuenta y no en los bolsillos es la mejor cura. Cuando vayamos a hacer un gasto debemos preguntarnos qué pasaría si no lo compramos ahora… si la respuesta es “nada”, entonces es mejor no comprarlo. Si no podemos hacer este drástico paso: guarde parte de los ingresos en una cuenta aparte, no ande con mucho efectivo y evite pasar por lugares donde suele gastar dinero sin cubrir necesidades. 
6- Le causa estrés el día de pago de las tarjetas de crédito: Muchas veces no somos capaces de ver esta clara señal. Algunos asesorados me explican sus dotes de pagar una tarjeta con la otra. Se justifican sin saber que su excusa no llega a ser una simple disculpa. Todo pago que genere costos es un mal innecesario. Es mejor tomar un crédito y dejar de lado las tarjetas hasta que pueda volver a usarlas sin que el pago cause estrés.
Claro está que salir de esta situación es imprescindible para no caer en deudas o deudas crónicas y para poder crear un futuro financiero sano y promisorio. En mi libro trato a profundidad el tema de la autoestima como causante principal de las deudas tontas. Lo importante es atacar la causa y las deudas son una consecuencia de un comportamiento.

FRASE DE LA SEMANA
“Corregir a tiempo nos lleva más rápido a una mejor vida.”
Diego A. Sosa
Coach, Escritor, Consultor y Conferencista


lunes, 31 de marzo de 2014

¿QUÉ ME MOTIVA?


La motivación es una de las áreas más buscadas en los ambientes laborales. Muchos quieren conseguir un equipo lleno de personas motivadas. En las áreas comerciales, por ejemplo, consiguen un líder que cada mañana le recuerde sus metas y lo que deben hacer a los integrantes de la manada. Los llenan de energía y los envían para la calle. Otros contratan un jefe que tenga mucha habilidad con su fusta y le apoyan cuando da latigazos verbales para que nadie se duerma en sus laureles y cada día logre un pedacito de su meta para llegar a fin de mes con los resultados esperados.
Muchas veces contratan a un conferencista, como a mí, para que motivemos a todo un equipo con una charla “motivacional”. Las más buscadas son las que cuentan una historia de éxito, si es propia mucho mejor. Hay que decirles a los participantes que ellos lograrán lo que se propongan: “Tú puedes”, es la consigna. Una hora de pura energía deben bastar para dejar a las personas emocionadas y motivadas. La pregunta es: ¿Por cuánto tiempo?
Esas charlas las llamo de “energización”, lo único que consigue es hacer que las personas que la escuchan conozcan una historia más de éxito, si no es que la conocían y salgan a la calle a tratar de traducir esa historia a lo que es su vida propia... bueno, a decir verdad la empresa quiere que conviertan la anécdota del charlista en una historia para la empresa, no para ellos.
El problema de los sistemas de motivación que plantee en los párrafos anteriores es que son externos. Los objetivos son para el bien de otro y las personas tienden a rechazarlos después de muy poco tiempo. La motivación externa tiende a no ser duradera.
Pensemos un momento: ¿Por cuánto tiempo puedo estar motivado si mi objetivo es que la empresa de otro logre sus objetivos? ¿Cuánto me durará la motivación cuando me de cuanta que la historia de éxito de otro no encaja con mi vida?
Me preguntará entonces que cómo debemos lograr motivar a los demás. Mi método es darle las herramientas para que él se automotive.
Si puedo lograr que las personas tengan un objetivo personal conseguiré que se miren al espejo cada mañana y decidan lograrlo, andando su camino propio trazado para su propósito individual. De lo contrario las personas entran en la zona de confort y será muy difícil moverlos fuera de ella. Y sin salir de dicha área es muy peliagudo lograr resultados extraordinarios y duraderos.
Lo primero que debemos hacer para estar motivados es tener sueños. Siempre los hemos tenido, dejamos algunos, perseguimos otros y muchos los posponemos. Lo más importante después de ver el sueño es despertar. Es hora de decidir si lo queremos realizar, cuándo comenzar y cuándo alcanzarlo.
Una vez tengamos el plan es hora de conseguir las herramientas. Muchas veces es dinero lo que necesitamos, entonces llegó el momento de hacer el plan para conseguirlo, o lo reunimos ahorrando y luego invirtiendo, o buscamos otra fuente de ingresos. Pero lo importante es conseguir la herramienta para lograrlo.
Muchas veces necesitaremos tiempo para lograr nuestro sueño. No en el sentido de posponerlo para otro momento, sino de que posiblemente nos llevará tres horas a la semana. Quizá sabe cómo conseguirlas, o me puedo imaginar que piensa que no dispone de ese tiempo. Le diré que no sea papagayo, sino águila, o sea, no busque excusas sino respuestas. No diga “no se puede”, sino pregúntese “¿cómo se puede?”.

FRASE DE LA SEMANA
“El que encuentra una solución para cada problema es el que alcanza sus sueños.”
Diego A. Sosa
Coach, Escritor, Consultor y Conferencista